​Para el inversionista de perfil conservador-moderado, la preservación de capital es el objetivo principal de inversión; sin embargo, tiene también como objetivo secundario la generación de ingresos corrientes o la apreciación moderada del capital en el tiempo. A pesar de sentirse incómodo con pérdidas de capital, el inversionista conservador-moderado está dispuesto a asumir cierta fluctuación ocasional en el valor de sus inversiones con tal de contar con un nivel medio-bajo de retorno esperado, el cual a través del tiempo se traduce en rentabilidad real (descontando la inflación) positiva, aunque modesta.​

​La estrategia de inversión del fondo varía de acuerdo al instrumento. Para el caso de los instrumentos de deuda, el Fondo busca optimizar la rentabilidad tomando en cuenta (i) la expectativa de evolución de las tasas de interés de corto, mediano y largo plazo, invirtiendo en aquellos plazos donde se considere se obtengan las mejores tasas de interés y (ii) los niveles de spread crediticio de los instrumentos de deuda y cuotas de fondos de instrumentos de deuda que coticen en el mercado, invirtiendo en aquellos instrumentos cuyos spreads compensen adecuadamente el riesgo inherente de los emisores. Por otro lado, para el caso de los instrumentos de participación en el patrimonio, busca optimizar la rentabilidad tomando en cuenta las expectativas de evolución de precios de los instrumentos de participación en el patrimonio.​